realmente puedo decir que es un evento especial que tenemos en la agenda de Niten.
oportunidad de convivir con Sensei, Senpai Wenzel y otros Senpais es algo
inigualable, pudimos experimentar de forma directa la manera de enseñar
de Sensei.
Una frase que Sensei dijo que me marcó mucho, fue al volver del Stand Up Paddle y
también cuando hicimos snorkeling:
"Fuimos donde nadie ha ido".
Creo que esta frase sintetiza bien el objetivo de Sensei.
"Llegar donde nadie ha llegado", y que permea todas las iniciativas pioneras que Sensei
realiza, reviviendo las tradiciones antiguas en la práctica.
Claro que el camino es difícil, al final es lo mismo adentrarse en una tierra desconocida, y
para esto necesitamos ser duros, cargarnos de fuerza y conocimiento, y es esto lo que Sensei hace
con nosotros, nos forja, testea nuestras fuerzas y nuestro coraje, y como Sensei mismo dice:
"No es nada personal, pero estamos en guerra".
Arigatou gozaimashita Sensei, ¡por ponernos a correr!
Mauro/DF
"Llegar a donde nadie ha llegado" requiere mas paciencia, cuidado y determinación.
Hay que creer en su remo, en su balsa. Perseverar.
Obviamente que como en toda jornada que usted se propone a hacer, existen aquellos
que intentan desmotivarlo. Pero no se les debe dar mucha atención. Lo importante es ir adelante.
Solo que después de tantas y tantas "remadas", usted "llega a donde nadie ha llegado",
"¡Ufff!" - el paisaje es gratificante.
Es posible que este sentimiento se compare al de muchos cuando llegan a Niten, después
de "remar y remar" sin encontrar lo que querían en el océano adentro. Sensación de
haber finalmente llegado al paisaje que realmente buscaban: El único lugar en el mundo
donde podríamos llamar como "Templo de los Samuráis".
Nos corresponde preservar este paisaje para el bien de las generaciones futuras.
La Easy Company del Encuentro
se hace fundamental la osadía innovando conocimientos.
Tuve la honra y el privilegio de conocer al Sensei Jorge Kishikawa, samurái de la actualidad
que se dedica en cuerpo y alma, transmitiendo a los samuráis modernos, las enseñanzas milenarias
de la filosofía del Bushido - el Camino del Guerrero" - General Akira Obara
El General Obara entiende, al igual que yo, que no basta apenas querer "conectarse con toda la
humanidad", sin pasar por dicha Transformación.
La razón es clara, pero no tan simple. Esto es porque el ser humano está lleno de
imperfecciones en todas sus acciones, palabras y pensamientos, sean conscientes o no,
son movidos por los 3 males que "amargan" cualquier buena relación.
Estos son: ganancia, rabia y estupidez.
Estos males, ya conocidos por todos, son la causa de la deslealtad, irrespeto y deshonra
en el Camino del Guerrero. Y es también causa de fricciones y desacuerdos entre los seres
de todos los pueblos.
Estos seres, centrados en sus ombligos, solo causan confusión y discordia por donde
pasan.
Para estos, el Bushido, un remedio que es un poco amargo, puede ser fuerte y eficaz para
transformarlos en seres aceptables y así merecedores de esta conexión.
Es por esto que la osadía es fundamental, pues a nadie le gustan las inyecciones.
Ganancia, rabia o estupidez: observe y verá.
Tanto aquí como en Japón. Denominada de guiri (pero escrita ‘giri’),
estaba entre una de las virtudes que los samuráis no abandonaban ni por asomo.
Hoy, las personas no agradecen más y ni siquiera se acuerdan de la mano que les fue tendida
cuando necesitaban. Estamos en el mundo de los ingratos.
Cómo una observación más, he percibido que, la mayor parte de la veces, la ingratitud y
falta de lealtad vienen acompañadas de la falta de educación, posiblemente por no haber tenido un
padre o madre de principios que les enseñara lo que habría de ser hecho.
Lo que nos interesa es reflejarnos en ejemplos, que a pesar de raros, existen.
Este es el caso de este alumno, cuya carta me fue enviada junto con su Primitivo di Manduria,
el inicio de este año.
Aunque no venga a entrenar hace casi 4 años, debido a motivos profesionales, viene
religiosamente a cada año, a desearme un Feliz Año Nuevo. Una raridad digna de
nota seguramente habría sido anotada por Yamamoto Tsunetomo (1659 – 1719) en su
Hagakure, cuando los samuráis, tal como en el mundo en que vivimos, habían perdido sus
valores.
Reinició sus entrenamientos y, ayer, después de la clase, vinimos a la
administración a tomar un vino y a cenar. Vino: Luca Malbec. Cena: Pizza.
Hablamos de diversos asuntos, empezando con una buena carne hasta llegar a lo que importa:
Buhido. Virtudes.
Y fue cuándo me reveló lo cuanto los valores, como la Lealtad, le hicieron un
‘samurái’ exigido por todos que le conocían, desde invitaciones de su propio grupo
a ir a Nueva York o Dubai, hasta invitaciones de grupos concurrentes.
Este alumno, de pocas palabras y discreto, es una prueba de que vale la pena que te esfuerces
en no querer sobresalirse, y lo principal: en tener Lealtad, al contrario de manchar su imagen por
algunos trocados o en beneficio propio.
Delante de este facto, puedo decir que tengo surte de tener algunos buenos alumnos.
Pero, antes de concluir, pido permiso para que yo haga una observación:
-Estamos en el siglo 21. Este es un mundo globalizado dónde todo se conecta.
Leal o traidor, un día su reputación será conocida. Entonces, vete para adelante.
Transcrição da carta:
Transcripción de la carta:
Sensei,
Shitsurei Shimassu.
Me acuerdo de la primera vez que tuve contacto con el Instituto Niten. Aceptando la invitación de un
amigo, fui a ver una clase de kenjutsu y, por casualidad, era un entreno de
iaijutsu. Ya que estaba allí, no me gustaría perder la oportunidad de apreciar el entreno.
Observando atentamente los sempais pujando los katas con energía y convirtiendo en un
único y elegante movimiento, me quedé en estado de shock y, durante este movimiento, percibí que mi
corazón era Iai y era esa la arte que quería hacer.
El Instituto Niten me proporcionó grandes momentos, gracias al compañerismo y
respecto de los colegas y de los sempais; Los valores predicados y, principalmente, por los Momentos
de Oro con Sensei. Y fue en una de esas oportunidades, cuándo tuve el honor de conversar
con el Sensei que aprendí una gran lección (#). Confeso que, aunque haya reflexionado
sobre el asunto, no tuve madurez para comprender el real significado.
El tiempo pasó y, por motivos profesionales, fui obligado a distanciarme de los entrenos, pero
siempre llevaba conmigo los buenos momentos y enseñanzas de Sensei. En una cierta ocasión
enfrentaba una gran batalla, durante la cual me vi cercado y casi sin alternativas para
proseguir, cuándo me acordé de aquella enseñanza (#) que en la época no había
comprendido, pero que ahora venía con una grande luz, haciendo con que repensara mis estrategias.
Sé que el camino es longo y tengo mucho que aprender, pero seguramente sé quién soy y
que lo soy gracias a lo que he aprendido (#), y por todo eso agradezco profundamente a Sensei por las
enseñanzas y por la oportunidad de mostrar el Iai y todo el beneficio que obtuve.
Domo Arigatou Gozaimashita
Márcio hiroshi Kikuti
Estamos ya finalizando febrero y aquellos que en 2013 juraron retomar
el Camino aun no dejaron ver sus caras.
Con seguridad, esperan, como la mayor parte de los brasileros, que acabe el Carnaval,
lo que no es más que un gran engaño para ellos mismos.
Perder peso, una de las grandes preocupaciones en términos de salud y uno
de los mayores motivos para retomar el Camino.
Aquí en el templo de los Samuráis, a pesar de no ser el objetivo primordial,
perder pero es uno de los resultados a los que se llega en medio de la tan
buscada transformación. Transformación de la mente, del espíritu, del
carácter, del alma...
No, no receto pastillas o cremas milagrosas que, dicen por ahí, quitan los
gorditos extra que tanto les incomoda.
Si usted es uno de esos que busca una respuesta inmediata, podría no quedar
satisfecho, pero aquí el secreto para adelgazar es mas complejo.
Tan complejo que el tiempo de un Café es poco para explicarle. Pero
una cosa si les garantizo, en este Gashuku usted va a comenzar a descubrirlo.
Mientras tanto, vale la pena, en tanto nos tomamos este, apreciar
el siguiente testimonio.
Vea si no vale la pena:
"Soy de la Unidad de Guarulhos, Nomura Massato, yoroshiku onegai
shimasu.
Estoy escribiendo pues un tiempo atrás Sensei nos contó sobre un alumno
que perdió peso y fueron bellas palabras las que fueron descritas. Pero
tengo que contar mi relato.
Yo, en agosto, pesaba 110 kg.
Estaba con principios de diabetes, presión alta y ácido úrico elevado, estaba
tan desanimado que evitaba hasta salir de casa. Viendo esta situación, mi
hermano, Rafanelli, insistió para que comenzara a entrenar Kenjutsu en el Instituto
Niten, unidad de Guarulhos. Comencé a ir a Guarulhos y a Santana.
Al comienzo, no conseguía ni terminar un entrenamiento, mi glicemia
se bajó algunas veces, pero me gustaban mucho los entrenamientos, los Senpais siempre
fueron comprensivos, pacientes y animadores.
(Después de 3 meses de entrenamiento) A principios de mes (en Noviembre), fui al médico,
suspendió todas las medicinas, pues todos los resultados estaban
excelentes, y luego fui a mi nutricionista.
Mi peso ahora era de 77kg, aun así ella me recomendó levantar pesas
para mejorar mi cuadro general. Sin embargo, en vez de hacer pesas, yo incrementé a 4 entrenamientos
de Kenjutsu semanales, estoy aun adaptándome a esta cantidad de entrenamientos, pero
los Senpais de Tatuapé y Sumaré están dándome mucha fuerza para aguantar
esta etapa de esfuerzo.
Solo tengo agradecimientos a Sensei, pues con sus enseñanzas que son
pasadas por los Coordinadores y Senpais he aprendido a superarme. ¡Y
quiero aprender aun más!"
Massato - Unidad Guarulhos
postura del Hasso
"Hoy, en mi segundo día de shugyo (entrenamiento espiritual), tuve la oportunidad de tener
una muestra
el Gashuku (entrenamiento intensivo) de este fin de semana. Hablo del Hidensho y la
búsqueda incesante de Sensei por la victoria absoluta.
Por dos horas seguidas luché con Sensei y tuve la oportunidad de presenciar la energía y
los "golpes fantasma" tan famosos. Esta mañana, por ejemplo, el momento mas representativo
fue cuando Sensei armó hasso * y me golpeó en más de diez oportunidades "mens" (cabeza)
consecutivos.
Lo peor fue que Sensei me avisó y después del tercero yo sabía que el iría a intentar acertar
en la cabeza y aun así, sucumbí a todos los golpes realizados. Intenté defender,
otro más. Intente golpear antes de que Sensei se moviera, otro más. Intenté esperar para golpear
en el momento que Sensei "disparaba" el corte, otro más. Vi gran parte de los golpes en
cámara lenta pero no conseguí hacer nada para detenerlos o superarlos. Aun así, no
fueron solo " mens", hubo mas de diez "kotes" (antebrazo), varios "Do" (torso)
y muchos "tsukis" (estocadas en el cuello) siguiendo el mismo principio "fantasma". Hidensho
corta el alma, llegué a esa conclusión.
En el entrenamiento, mi alma y espíritu fueron triturados, para sentir el verdadero
poder del hasso, el kamae de la madera, por primera vez en verdad. Utilizando esta
postura Sensei realmente recreó un tsunami: no importa lo que usted haga, en frente
a este ¡usted se ahogará! ¡Y cómo me ahogué esta mañana!
A todos los que vendrán al Templo Nikkyoji este fin de semana, ustedes estarán con suerte, pues
Sensei demostrará el Hidensho y estas técnicas secretas, para que podamos, después de
un arduo entrenamiento, tener el gusto de la ¡victoria verdadera!
Personalmente, no podemos esperar hasta el sábado y domingo, para poder entender de verdad lo
que este kamae (postura) es capaz de hacer y como recibí más de veinte golpes
consecutivos. Gracias a lo que sucedió hoy, puedo garantizarles que este fin de semana será
técnicamente, como mínimo, muy especial."
Kalawatis (Unidad Volta Redonda)
Maleabilidad.
Esta es una característica de este alumno carioca. Sin quedarse con una postura (kamae)
fija, hay mayor facilidad para dar golpes y "agarrar" a los que tienen una postura fija
o rígida como el Tchudan básico (con la punta hacia el oponente). Soetes y utigotes
que requieren atención.
Un alumno que ya llegó una semana antes del evento, se rasuró la cabeza, entrenó hoy por
la mañana, "pagó flexiones" y que está sediento por descubrir los secretos del Hidensho.
Fue candidato a ser una de las Fieras en los 20 años de Niten y, si continua con ese pique,
podrá volverse ¡imbatible en el combate!
Sensei aplicando un Sassen (estocada con una mano) en el Gashuku de 2013
Artículo publicado en el Diario del Grande ABC - Domingo, 2 de febrero de 2014
"Jorge Kishikawa nació en São Paulo, visita Japón hace mas de 25 años. Allá
convivió con los últimos samuráis y tiene en su currículo mas de 40 años
de entrenamiento con la espada. Es de la décima generación del estilo de Miyamoto Musashi.
De familia japonesa, comenzó a interesarse por los valores de allá desde muy temprana edad. Buscó
personas obstinadamente y decidió convivir con los maestros. "Verlos realizando
una determinada tarea con perfección, intentando diversas veces hasta conseguirlo, acaba
contagiándote. Es aquella vieja frase: 'Dime con quién andas y te diré quién eres'. Yo
anduve con ese tipo de personas", explica.
Kishikawa comenzó a convivir con los maestros a los 19 años, cuando realizó un entrenamiento
intensivo por casi un año en Japón. Requirió pausar su curso de medicina para rodar
con varios maestros y conocer la personalidad de cada uno. "Después de los entrenamientos, me quedaba
acompañándolos, tomaba café, almorzaba y oía las historias que los padres y abuelos les contaban",
recuerda. Según el Sensei, con la convivencia es que se aprende a sentarse, mirar,
comer, oír y hablar de la forma correcta.
A pesar de que los samuráis no se comporten como guerreros desde 1868, Kishikawa es
considerado uno, no por guerrear, sino por seguir esa filosofía de vida en tiempo
integral. "Hace algunos años, dejé de trabajar como médico para dedicarme
integralmente a la espada"
El Instituto Niten existe hace mas de 20 años y se expandió por el simple hecho de encontrar
'locos' como él, personas brillantes que creen en la filosofía y llevan en frente
el trabajo en otras ciudades. "Siempre tuve en mente que mi vida es ir para adelante,
haga sol o llueva. No considero lo que hago como trabajo. Es mi pasión. Las personas
vienen hasta nosotros y, después de pasar un tiempo conmigo, no quieren dejar de entrenar. Entonces,
quieren entrenar en su propia ciudad".
El aparte del artículo donde se lee:
"Buscó personas obstinadamente y decidió convivir con los maestros. "Verlos
realizando una determinada tarea con perfección, intentando diversas veces hasta conseguirlo,
acaba contagiándote. Es aquella vieja frase: 'Dime con quién andas y te diré
quién eres'. Yo anduve con ese tipo de personas", explica.
Kishikawa comenzó a convivir con los maestros a los 19 años, cuando realizó
un entrenamiento intensivo por casi un año en Japón. Requirió pausar su curso de
medicina para rodar con varios maestros y conocer la personalidad de cada uno.
"Después de los entrenamientos, me quedaba acompañándolos, tomaba café, almorzaba y oía las
historias que los padres y abuelos les contaban", recuerda. Según el Sensei, con
la convivencia es que se aprende a sentarse, mirar, comer, oír y hablar de la forma correcta."
Adquirí conocimientos que hoy en día ya no se ven, oyen y no se hacen mas.
Ni aquí, ni allá en Japón.
Explico:
- Aquí, porque los descendientes, lejos de su tierra natal, no tenían acceso a este tipo
de cultura. O sea, crecieron con "cara de japoneses", pero en el fondo eran como
ciudadanos que nunca habían estado en Japón.
- Allá en Japón, porque ya después de la segunda guerra, Japón fue perdiendo su identidad (por
imposición americana) y los jóvenes (hoy señores de 60 y 70 años) estaban mas
interesados en absorber al cultura americana que en preservar la nipona.
Entonces este era el escenario: en la década del 80 y 90 allá estaba yo. Solo "remando contra
la corriente" en busca del pasado, de la forma como está escrito en el artículo.
Pasaron algunos años y Niten creciendo, tuve que escribir el Shin Hagakure, una
especie de reglamento interno para nuestros alumnos, pues unificar los pensamientos,
sentimientos y actitudes era necesario. El Shin Hagakure, superando nuestras expectativas,
fue bien recibido hasta por el público en general. Gente que no entrenaba y novatos que no
conocían la cultura japonesa me enviaban mensajes de agradecimiento y alegría,
simplemente por haber sido transformados por el libro.
La sorpresa llegó ahora, el mes pasado, cuando recibí un mensaje de nuestro noble
patrocinador, General Akira Obara, para conversar sobre el Shin Hagakure.
Para no prolongarme, voy a resumir lo que el dijo:
"Estuve leyendo el Shin Hagakure y vi que es un libro profundo en lo relacionado a la cultura
militar. En la cultura militar, tenemos el R2 - Contingencias y Honras, es el reglamento
donde está escrito como comportarse cuando se está acompañado de superiores e inferiores,
además de la forma de llevar a cabo una misión y otros asuntos. Veo el Shin Hagakure siendo como
un "R2" que va a fondo en las actitudes y que todos nosotros, principalmente
descendientes de japoneses y también militares, deberíamos absorber.
Mis felicitaciones, me asombro al saber que Sensei consigue llevar estas
enseñanzas a sus alumnos, pues hoy en día no debe ser nada fácil..."
Sí. Es profundo porque no fueron apenas 25, como esta escrito en el artículo, más de 30 años.
30 años al lado de los Últimos Samuráis y casi una vida entera para escribirse en un
libro.
Y, no. No es nada fácil, pero a esta altura del campeonato, cuando el mundo no puede
cambiarme más, continuaré intentando yo, cambiar el mundo...
Buenas perspectivas,buena energía o alto astral
No importa el nombre que se de a la razón de una transformación para mejorar,
pero aquí las cosas buenas suceden. La vida sucede.
En contraste respecto a la mayor parte del mundo, donde el remolino del huracán empuja a toda la
manada a correr hacia lo alto del precipicio, aquí en Niten los alumnos encuentran el reposo
del guerrero en un plano diferente e impar: en el ojo del huracán.
Édio comenzó la senda del entrenamiento en São Paulo, habiéndose desplazado para Salvador por
motivos profesionales hace mas de 10 años.
En aquella época, como un explorador que fue abriéndose paso por la selva, comenzó Niten
en la capital Bahiana.
Ya pasó más de una década y es mas que normal que la vida haya construido
muchas historias allí, con el pasar del tiempo.
Pero esta, sin duda, es muy emocionante:
Clique para ampliar
TRADUCIÓN DE LA CARTA
Salvador, 29 de diciembre de 2013
Sensei, Shitsurei shimassu.
Este año fue bastante agitado, mas sin embargo al final ha sido excepcional.
Por obra de los dioses, ella y yo conseguimos encontrarnos después del evento de los 20 años del Instituto Niten.
Estamos muy bien, juntos nuevamente, pues el periodo donde estuvimos separados el uno del otro,
hizo que cada uno pudiera madurar. Durante este periodo, me concentré aun más en el entrenamiento y en el camino.
Pude percibir ciertas fallas que estaban contaminando mi espíritu. Arigato gozaimashitá a Sensei y al Instituto por
el apoyo que recibí en los momentos difíciles.
El hecho más importante para mi este año fue ver a mi hijo Katsuo comenzar a recorrer el camino.
Siempre me lamenté por no haber tenido la oportunidad de encontrar el Instituto Niten más temprano en mi vida,
al contrario quiero que mis hijos puedan vivir una vida mas plena y feliz de lo que yo estoy teniéndola.
Creo que el resultado puede ser confirmado en la foto anexa a esta carta.
Me siento muy agradecido y honrado por haber compartido con Sensei este año y con el hecho que el
Instituto Niten completó 20 años. ¡Que vengan los próximos 20!
Domo arigatou-gozaimashitá Sensei, por enseñar el verdadero camino para la vida.
Sayounará,
Édio Yamauti
Acá la vida acontece.
Ayer comenté en los Momentos de Oro uno de los combates
emocionaron los espectadores en los últimos 20 años: Danilo x
Massao
Los detalles de los comentarios fueron grabados y van a ser repasados a todos
los alumnos durante las próximas clases por sus respectivos coordinadores.
La parte importante de lo que me gustaría dejar acá es que, para vencer el
Combate, es necesario estudiar la ciencia de la Estrategia y del Coraje.
Ambas son importantes en su éxito pero me voy a limitar a la Estrategia: esa
debe ser pensada, elabora, testada y comprobada.
En este sentido es que la diversidad de posiciones (kamae) y la elección de las
armas hace la diferencia en lo de “entrenar la Estrategia”
(ya que, hasta donde alcanzo saber, nadie nasce estratega).
Y es justamente en este punto, en la diversidad, que el Kenjutsu combate
exige de aquel que lo practica todas las aptitudes que todo buen general
necesita: la creatividad, la flexibilidad, la astucia y el coraje.
Estoy seguro que, después de un buen entrenamiento, todos podrán,
llevando estas aptitudes, ser buenos generales en sus guerras.